El oido que olvidamos escuchar

Cambios. Nos rodean todo el tiempo pero las personas continuamos entremedio, cambiantes pero constantes. Es muy importante estar preparados para cualquier sorpresa, ahora es cuando ya muchas cosas se nos escaparon de cada mano y están en las de todos al mismo tiempo... y nadie es todos. Katrina fue un ejemplo mundial de lo que llega. El grandilocuente calentamiento global cada día se impulsa sin ser notado o a ratos siendo alucinado, pero es real y su sonido recorre los mares las tierras y los aires de todos y cada uno de nosotros, y el resto. Los problemas económicos en la región sudamericana preocupan a todos aquellos que miran más allá de lo que alcanzan a ver con sus ojos. Existen corrupciones y bastante pensamiento de lo barato-y-fácil para conseguir las cosas (uno de los problemas hijos del judeocristianismo, tan cariñoso ) pero aun así, en cada individuo joven y con miras suficientes (y algo autosuficientes) emerge esa posibilidad de entendimiento y avance a mejorar la vida de todos, sabiendo y entendiendo lo que eso significa. Buscamos mejor soporte emocional en drogas psicotrópicas. Queremos estabilidad económica desde la competencia. Sentimos miedo del desconocido pero soportamos al maldito que vemos cada día. Buscamos alegría vaciando el resto de los sentimientos. Trabajamos para mantener a tantos pero poco los mantenemos entre nuestros brazos. Nos juntamos para divertirnos aunque nos "diviertimos" para reunirnos. y tantas sombras... Buscando en lo que brota de nuestras manos, cuando realmente se necesita el brote de otra mano en la sequedad de las propias y brotar en otras manos, para también calmar su sed. Mucha sorpresa esta allá. Uno Otro Nosotros... Finalmente, nosotros no somos iluminados, sino que solo somos aquel espacio entre La luz y Su sombra Espacio que late.